El reto colombiano:
Insertar más rápidamente la tecnología
Una lección que debemos aprender de
los tigres asiáticos
IMOCOM
es una compañía que esta empezando su séptima década, una amplía trayectoria
que le ha permitido acompañar el desarrollo de la industria en el país y por lo
tanto entendemos hacia dónde se debe perfilar en el futuro.
Llevamos
60 años, inmersos en el mundo exterior conociendo cómo han evolucionado nuestras
pares en el orbe, verificando cuáles son los pasos que hay que dar para llegar
a ser altamente tecnificados, que es lo que debe buscar todo industrial.
Hoy
en día el paradigma de competir con mano de obra barata, o con protección
arancelaria se ha acabado, hay que tener las mismas herramientas que tienen las
firmas globalizadas y esto en el mundo del conocimiento no es otra cosa que
insertar tecnología centrada en la automatización.
Dicha
característica, permite trabajar de una manera más precisa, más estandarizada
tanto en su calidad como en los tiempos de manufactura, y eso es lo que hacen
países como Hong Kong, Singapur, Korea del Sur y Taiwán, los tigres asiáticos.
Países
que hace 50 años eran muy parecidos en sus niveles de desarrollo a Colombia y
que hoy en día nos llevan años luz en competitividad, porque han insertado
“rápidamente” la tecnología en sus
economías.
Si
lo evaluamos concienzudamente, Colombia esta rezagado competitivamente, porque
a diferencia de países industrializados de la región como Brasil y México, ha
tenido una lenta inserción tecnológica.
En México, la segunda economía de la región, hay más de 10
mil robots, mientras en Colombia apenas llegamos a los 100. Nuestro parque
industrial consume anualmente entre 300 y 400 maquinas CNC, mientras que en
México se consumen 6.000 y en
Brasil de 7 a
10 mil.
Así
que la tarea es seguir también el ejemplo de estos maestros asiáticos de la
industrialización, que tuvieron un
acelerado desarrollo usando como pilar fundamental la automatización, máquinas
con mandos numéricos o programables.
IMOCOM
fue pionero en trasferir tecnología de Control Numérico (CNC) en Colombia desde
los años 70´s, y al igual que en otras innovaciones la acompañamos de
capacitación y servicio técnico
especializado, con lo cual estamos dando nuestra cuota.
Pero
esta inserción rápida, también requiere de un esfuerzo por parte del Estado,
que debe poner mucho énfasis en el desarrollo del recurso humano, apoyando la
tecnificación de la mano de obra, ya que las industrias necesitan
administradores modernos y operarios entrenados.
E
igualmente, un esfuerzo por parte del sistema financiero. La tecnología cuesta
dinero y en esto nuestro sistema bancario no ha sido oportuno. En el mundo
desarrollado, la banca se ha preparado para atender ese sector de la economía
con eficiencia, diseñando líneas de crédito acordes con la mecánica del sector
y generando una cultura de crédito en ese sentido, abierta a éste tipo de
transacciones. Hay que empezar por romper paradigmas, e irrigar recursos
con plazos más largos y con políticas de
riesgo ajustadas, lo cual requiere también del concurso gubernamental por el
tema regulatorio.
Es
el momento de invertir en tecnología, en desarrollo, la coyuntura actual lo
permite, la reevaluación del peso y el hecho de poder importar tecnología al
país con cero aranceles, hacen que hoy más que nunca las máquinas y equipos
sean más accesibles.
Y
es precisamente en este marco que en nuestro sesenta aniversario, llegaremos a
los industriales, por primera vez, con un pabellón de 3 mil metros cuadrados
para exhibir y tener en funcionamiento más de 65 máquinas, de 12 tecnologías
distintas, provenientes de por lo menos 16 países del mundo.
Lo
que queda es que industriales, gobierno y sistema financiero, unamos esfuerzos
para asumir el reto de apoyar su inserción rápida, sólo así llegaremos a ser
líderes de la industrialización en la región… una lección que debemos aprender
de los tigres asiáticos.
Pablo
Etter R.
Gerente
General IMOCOM